Frenos de scooter freestyle que te mantienen bajo control

Hay 2 tipos principales de frenos de scooter: flex fenders y frenos de resorte. Además, también se puede usar un fender en lugar de un freno. Algunos scooters los tienen preinstalados y otros no, lo que significa que debes elegir el tipo que sea compatible con tu setup. Todos los frenos de scooter se instalan en la rueda trasera y son tanto duraderos como fáciles de instalar.

Fender, Flex Fenders y frenos de resorte: ¿cuál es la diferencia?

Los Fenders clásicos de scooter están diseñados para evitar que el pie trasero entre en contacto con la rueda trasera. Los Fenders en realidad no son frenos y, aunque se encuentran en el mismo lugar, funcionan más como una protección entre el pie y la rueda. Son especialmente útiles para evitar frenazos accidentales cuando el pie aterriza demasiado hacia el final de la tabla después de hacer saltos o trucos como un tailwhip. El Fender evita que el pie entre en contacto con la rueda trasera giratoria y te permite salir del truco sin ser interrumpido.

Los Flex Fender, como su nombre lo indica, son flexibles, ya que se pueden doblar cuando los empujas con el pie trasero. Este es un método útil para reducir la velocidad, pero es importante recordar que nunca debes presionar tan fuerte que la rueda deje de girar. Esto dará como resultado puntos planos y puede arruinar el rendimiento de la rueda.

El último sistema de freno que mencionamos es el freno de resorte. Este contiene un resorte helicoidal que mantiene el freno apuntando lejos de la rueda, pero se puede presionar con el pie para frenar. Este tipo de freno tiende a ser más ruidoso que los Fenders y puede requerir más mantenimiento.

Sea cual sea el sistema de frenos de scooter que elijas, recuerda que debe ser compatible con su tabla y adaptarse al tamaño de las ruedas que estás utilizando. Para obtener más información al respecto, consulta nuestra guía para Comprar frenos para patinetes.